De otro solar de este apellido, en Asturias, hay más amplias y puntuales noticias. Radicó en el lugar de Soto de Cangas, perteneciente al Ayuntamiento de Cangas de Onís, junto a la peña de Covadonga, y sus descendientes tomaron el nombre de dicho pueblo por apellido. Tenían asiento distinguido en el altar mayor de la iglesia de Covadonga en el lado del Evangelio, y capilla y entierro, con sus escudos de armas en tres sepulturas, en el monasterio de Santo Tomás de Villanueva, de la Orden de San Benito. Esa capilla estaba bajo la advocación de San Andrés.
Gozaban, además, los hijos de esta casa solar asturiana del privilegio de nombrar Jueces y Procuradores en el Concejo de Cangas de Onís, y en los días de grandes fiestas daban guardia en el altar mayor de la iglesia del convento mientras se celebraba el sacrificio de la misa.
Se dice también en algunas informaciones manuscritas sobre los Soto de la casa de Asturias, que uno de sus primeros Señores y fundador de la citada capilla de San Andrés, se llamó Gutierre Álvarez de Soto, caballero de gran prestigio, del que fueron descendientes los hermanos Juan de Soto y Ruiz de Soto, y que asistieron a la batalla del Salado y armó Caballeros de la Banda el Rey Alfonso XI. Y se añade que dicho Ruiz de Soto fué padre de Juan de Soto, que sirvió como Capitán a Enrique II y murió en la toma de la fortaleza de Cameros; abuelo de otro Ruiz de Soto, bisabuelo de otro Ruiz de Soto, tercer abuelo de Diego de Soto, Caballero de Santiago, y de Jerónimo Soto, y cuarto abuelo de doña Isabel de Soto, que sucedió en el mayorazgo y en la que terminó la varonía de esta familia, mujer de Diego de Fajardo. Está citada igualmente en los mismos informes, como descendiente del solar de Asturias, doña Leonor de Soto, Dama de la Reina doña Isabel la Católica y mujer de don Alfonso de Aragón, Duque de Villahermosa e hijo natural del Rey aragonés don Juan II.
Pero los datos genealógicos que acabamos de reproducir ofrecen dos motivos de duda en lo que respecta a que los caballeros que mencionan fuesen, en realidad, descendientes directos del solar asturiano de Soto en el lugar de Soto de Cangas. El primero de esos motivos lo origina el hecho de aparecer nombrados en otras fuentes informativas como oriundos de solares distintos del de Asturias. Y el segundo motivo lo engendra el estar apellidado Soto y Sotolongo indistintamente por autores que han escrito sobre Sotolongo, el Caballero de la Banda Ruiz de Soto, hermano del también Caballero de la misma Orden Juan de Soto, citados en anteriores líneas, por entender, sin duda, que ambos apellidos son uno mismo, pero sin justificar esa creencia con el más leve razonamiento, ni con testimonio alguno que la abone. Y también sin base medianamente lógica para hacer a la familia Sotolongo, como la hacen, descendiente directa del solar asturiano de Soto a que venimos refiriéndonos.